En la orilla del mar te invoco,
y como una espumosa ola te veo llegar.
Tus brazos dulces y salados me rodean,
invisibles, latentes, cálidos.
Resbaladizos, de mi alma se escurren
y con el océano te fundes
ante mi anhelante mirada.
Ah! pero te vuelvo a invocar,
un día tú y yo seremos uno
y el mar será nuestro hogar.
***
Existen silencios más dolorosos
que las palabras más hirientes
***
Las palabras pueden convertirse
en espesos silencios
e invocar frías ausencias,
pero basta con evocarte en mi mente
para envolver mi alma en terciopelo
***
Gritaría al viento
las palabras que mi corazón calla,
para que las más bellas aves del cielo
al oído te las susurraran
***
Espero
com el sol espera que pase la tormenta,
como las flores la llegada de la Primavera,
como los jilgueros y los ruiseñores que despunte el alba,
como los búhos y las lechuzas la llegada del ocaso.
Espero
porque ella es el arco iris que aparece después de la lluvia,
porque ella hace florecer la alegría en mi espíritu,
porque ella despierta el amor que duerme en mi interior,
porque ella ilumina mis momentos más oscuros.
Espero mi amanecer...
***
No tengas miedo a amar,
tus momentos tristes ya viviste.
No tengas miedo a ser amada,
vivir los colores de la felicidad te toca.
Déjame amarte.
Amémonos.
***
Hicieron falta muchos golpes
para endurecer mi corazón,
pero el roce de su mirada bastó
para derretir toda mi protección.
***
Cuando la tormenta caiga sobre ti,
yo seré el paraguas que te proteja,
pero si sentir el agua sobre tu piel
es lo que anhelas,
bajo la lluvia contigo bailaré.
Cuando el sol del verano abrase tu piel,
yo seré la sombra que te refresque,
pero si sentir el calor sobre tu cuerpo
es lo que deseas,
sus rayos hacia ti yo atraeré.
***
Cuatro palabras.
Cuatro palabras bastaron
para alegrarme el día.
Cuatro palabras
que tenían la forma de su voz.
***
Se alejó,
pero aún puedo verla.
Calló,
pero aún puedo escuchar su voz.
Se fue,
pero no se fue.
Me quedé orbitando
como un satélite,
dando vueltas a su alrededor.
ella ajena a mi presencia,
ignorante de mi lamento.
Que mis pensamientos
derriben sus muros!
Que mi aliento
funda su frialdad!
Que llegue el día
en que nuestro lazo
venza a la gravedad!
Y juntos recorramos el cosmos,
o mi corazón se desintegre en mil pedazos.
Para siempre.
***
Te pienso cada instante de cada día,
y quizá mi ego no tenga suficiente con ello,
pero evocar tu imagen en mi mente
hace que mi alma brille como una estrella en la noche.